Si quieres seguir disfrutando de la conducción durante todo el año, tendrás que pensar en cómo preparar tu coche para el invierno. Las siguientes comprobaciones son fáciles de hacer y no requieren conocimientos especiales de mecánica.
Comprueba los niveles
Sin realmente pensar en ello, todos nos preparamos para el invierno de una forma natural. Guardamos la ropa de verano y desenterramos los abrigos. Pedimos leña para la chimenea o sacamos la calefacción eléctrica del trastero. Incluso cambiamos el tipo de comida que comemos. En realidad, hacemos todo lo posible para asegurarnos que nuestras vidas sigan como siempre a pesar de la caída de las temperaturas.
El primer paso para preparar el coche para el invierno es revisar los niveles del aceite, del líquido limpiaparabrisas y del anticongelante del motor/agua. Aparca el coche en una superficie plana y nivelada, y espera hasta que el motor se enfríe.
El nivel del anticongelante del motor/agua debe estar entre las líneas mínima y máxima del indicador de nivel para evitar que el motor se congele o sobrecaliente. Si tienes que llenar el nivel, asegúrate de utilizar la proporción correcta de agua y refrigerante/anticongelante.
Con el lavaparabrisas es tan sencillo como comprobar el nivel de la botella, llenarlo de agua y líquido limpiaparabrisas y volver a poner el tapón.
No olvides comprobar:
- Los niveles de aceite
- El líquido del limpiaparabrisas
- El anticongelante del motor/agua
- Los neumáticos
- Las escobillas del limpiaparabrisas
- Las luces
- El estado de la batería
Por último, el aceite. Saca la varilla, limpia el exceso de aceite con un trapo, vuelve a introducir la varilla y sácala de nuevo. Verás unas marcas de mínimo y máximo en el extremo de la varilla. Si crees que tienes que añadir aceite, quita el tapón y echa el aceite poco a poco, comprobando al mismo tiempo el nivel con la varilla. Es muy fácil llenarlo en exceso, así que hazlo lentamente.
Comprueba los neumáticos
Cuando prepares el coche para el invierno, es importante que te asegures de que los neumáticos (incluyendo el de repuesto) están en buenas condiciones y que tienen aún suficiente dibujo como para durar toda la temporada. Busca cualquier desgaste irregular, corte, bulto o daño en las ruedas y, si ves algo preocupante, pide a tu distribuidor local de Uniroyal que lo compruebe. Como siempre, mira la presión de los neumáticos regularmente.
Comprueba las escobillas del limpiaparabrisas
Los limpiaparabrisas son muy usados en invierno, así que es importante que estén en buenas condiciones. Pasa los dedos a lo largo de las escobillas de goma para comprobar si tienen grietas o fisuras. Cámbialas si es necesario.
Comprueba las luces
Las luces también se utilizan más en invierno que en cualquier otra época del año. Y puede ser la primera vez en mucho tiempo que tengas que utilizar las luces antiniebla. Pídele a un amigo que te ayude a revisar todas las luces y cambia las bombillas en caso necesario. Finalmente, asegúrate de que los faros están limpios y sin fisuras.
Una última cosa, y esto puede que requiera una visita al taller: es una buena idea revisar la batería. El mecánico podrá ver cuánta vida le queda y cambiarla si puede que se agote pronto y te deje tirado.
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